Es en la boca donde realmente se inicia el proceso de digestión de alimentos. Los dientes, las encías y la lengua son el primer lugar donde tienen contacto los nutrientes que ingresan a nuestro cuerpo. Si su nutrición es deficiente, las primeras señales a menudo se manifestarán en su boca.
Por otra parte, el asesoramiento dietético para la prevención de las enfermedades bucodentales debería formar parte de las prácticas rutinarias de educación de los pacientes. No existe un consenso entre nutricionistas y odontólogos para brindar guías nutricionales con el fin de prevenir el deterioro dental.
Hoy aprenderemos cuál es la conexión oral-sistémica, los alimentos que deterioran su salud dental, los alimentos que la benefician qué tiene que ver el azúcar en todo esto y lo que usted puede hacer para reducir el riesgo de caries.
Se ha reconocido que la infección oral, especialmente la periodontitis, puede afectar al curso y a la patogénesis de una serie de enfermedades sistémicas, como las enfermedades cardiovasculares, la neumonía bacteriana, la diabetes mellitus y el bajo peso al nacer. (1)
Cada vez está más claro que la cavidad oral puede actuar como lugar de origen para la diseminación de organismos patógenos a zonas corporales distantes, especialmente en huéspedes inmunodeprimidos, como los pacientes que padecen tumores malignos, diabetes o artritis reumatoide, o que reciben tratamiento con cortico esteroides u otros inmunosupresores. Varios estudios epidemiológicos han sugerido que la infección oral, especialmente ciertos tipos de periodontitis, pueden ser un factor de riesgo de enfermedades sistémicas.
Por ejemplo, el Ictus o derrame cerebral, es una enfermedad cerebrovascular afectando a los vasos sanguíneos que suministran sangre al cerebro.
El periodoncio (a encía o mucosa gingival que es aquella parte de la mucosa oral que rodea el cuello de los dientes) inflamado libera citoquinas inflamatorias, LPS (endotoxinas) y bacterias en la circulación sistémica, y pueden promover la aterosclerosis y afectar a la coagulación sanguínea, la función de las plaquetas y la síntesis de PG(Prostaglandinas o productos derivados de ácidos grasos), contribuyendo así a la aparición del derrame. En un estudio de casos y controles, se comparó el estado dental de 40 pacientes menores de 50 años con infarto cerebral y 40 controles comunitarios seleccionados aleatoriamente y emparejados por sexo y edad. La mala salud bucodental, evaluada por el índice dental total y la ortopantomografía (radiografía del arco dentario), era más frecuente en los pacientes con infarto cerebral que en los individuos del grupo de control.
La neumonía bacteriana resulta de la aspiración de flora orofaringea (bacterias que se alojan en boca y garganta) en el tracto respiratorio inferior, fallas en los mecanismos de defensa del huésped para eliminarlos, la multiplicación de los microorganismos y la subsecuente destrucción del tejido. Parece que la mayoría de los patógenos colonizan primero las superficies de la cavidad oral o la mucosa faríngea antes de la aspiración. Estos patógenos pueden colonizar desde una fuente exógena siguiendo una producción exagerada de la flora oral normal luego de un tratamiento con antibiótico.
Tiene sentido entonces que una dieta más saludable no solo mejora la salud en general, sino la salud dental, concluyendo que una mala alimentación puede provocar caries y enfermedades de las encías, pero también puede provocar problemas de salud graves.
Nutrición conectada directamente a la salud oral
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Existe una relación bidireccional entre la salud bucodental y la nutrición dietética. Dieta y nutrición afectan la salud de los tejidos de la boca; y la salud de la boca afecta a los nutrientes consumidos.
La relación entre la caries y los hidratos de carbono se conoce bastante bien; los tejidos dentales duros se desmineralizan por los subproductos ácidos producidos por las bacterias de la biopelícula (placa dental) a través de la fermentación de los hidratos de carbono de la dieta. Más concretamente, se produce un rápido descenso del pH (hasta 5,5 o menos) en la biopelícula dental tras la ingesta de hidratos de carbono. Este descenso del pH también puede afectar al equilibrio de los microbios en la biopelícula, de modo que hay una mayor proporción de especies de biopelícula ácida, lo que agrava la desmineralización del diente. El consumo de carbohidratos es, por tanto, un importante factor nutricional en el desarrollo de la caries.
Los alimentos y las bebidas que usted consuma pueden tener una influencia directa en la incidencia y progresión de deterioro dental. (2) Ello depende de:
- La forma del alimento: hace la diferencia si es líquido, sólido, pegajoso o lento en disolverse.
- Cuán a menudo usted consume alimentos o bebidas azucaradas, así como alimentos o bebidas ácidas.
- La composición nutricional de sus comidas.
- La combinación de los alimentos y el orden en que los consume.
- Condiciones médicas como reflujo gastrointestinal, desórdenes alimenticios, los cuales pueden incrementar el riesgo de caries y debilitar la dentadura.
Tenga muy en cuenta especialmente que:
El consumo de azúcares se ha asociado a un mayor riesgo de desarrollar caries dental.
El consumo frecuente de alimentos y bebidas ácidas se asocia a un mayor riesgo de desgaste dental erosivo. Estos serían los causantes principales del deterioro dental.
Alimentos que deterioran su salud dental
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Alimentos repletos de calorías vacías (sin nutrientes) como caramelos, colombinas, mentas, gomas y dulces pegajosos; así como galletas, tortas, ponqués y pasabocas de paquetes son causantes de preocupación dental no solo por no proporcionar ningún aporte nutricional, sino por la cantidad y tipo de azúcar que contienen que se puede adherir a los dientes. La bacteria alojada en la boca se alimenta de estos azúcares liberando ácidos, los cuales conllevan al deterioro dental.
Bebidas a base de azúcar como gaseosas, jugos, limonada y café o té endulzados con azúcar son particularmente dañinos ya que los sorbos continuados provocan un baño constante de azúcar en los dientes que también promueve el deterioro dental.
Algunos alimentos nutritivos pero ácidos como los tomates y los frutos cítricos pueden tener un efecto ácido en el esmalte dental, así que deben consumirse como parte de una comida y no solos. Frutos secos como uvas pasas proporcionan nutrientes, pero debido a que su consistencia pegajosa, se adhieren a los dientes y la placa de ácidos que producen continúan dañando los dientes incluso mucho después de haberlos consumido.
Alimentos que benefician su salud dental
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El queso, la leche (si no tiene problemas de intolerancias), el yogurt, el tofu, verduras de hojas verdes y las almendras son alimentos que han de beneficiar su salud dental gracias a su elevado contenido de calcio y otros nutrientes.
Otros alimentos ricos en proteína como los huevos y la leche son las mejores fuentes de fósforo. Tanto el calcio como el fósforo juegan un papel muy importante en la salud oral ya que protegen y reconstruyen el esmalte dental.
Verduras (espinaca, kale, brócoli, apio, zanahoria, pimentón, pepino, ajo y cebolla, hongos shiitake)y algunas frutas (crocantes como manzanas y peras; kiwi , fresas y piña) pueden ser buenas elecciones para una buena salud oral puesto que cuentan con un elevado contenido de fibra y agua que ayudan a equilibrar los azúcares que contienen y ayudan a limpiar los dientes. Estos alimentos ayudan a estimular la producción de saliva que enjuaga ácidos dañinos y residuos de comida de los dientes, así como a neutralizar ácido protegiendo los dientes del deterioro. Además, muchas contienen vitamina C (importante para encías saludables y una rápida cicatrización de heridas) y vitamina A (otro nutriente clave para la formación del esmalte dental).
Según el periódico dental británico (3), La dieta puede ser un buen aliado en la prevención de la caries.
- Aumento del consumo de fibras: disminución de la absorción de los azúcares contenidos en otros alimentos.
- Las dietas caracterizadas por una relación de muchas amidas/poco azúcar tienen niveles muy bajos de caries.
- El queso tiene propiedades cariostáticas (agentes que inhiben la progresión de la caries dental).
- El calcio, el fósforo y la caseína contenidos en la leche de vaca inhiben la caries.
- Los alimentos integrales tienen propiedades protectoras: requieren una mayor masticación, estimulando así la secreción salival.
- Los cacahuetes, los quesos duros y, en algunos casos, la goma de mascar son buenos estimuladores gustativos/mecánicos de la secreción salival.
- El extracto de té negro aumenta la concentración de flúor en la placa y reduce la cariogenicidad de una dieta rica en azúcares.
- El flúor.
El flúor sigue siendo un hito en la prevención y en el control de la caries dental. Tiene un mecanismo de acción pre eruptivo (incorporación en el esmalte durante la amelogénesis) y otro post eruptivo (acción tópica). El flúor reduce las caries en un 20-40% en los niños, pero no las elimina por completo: aunque se utilice el flúor, la asociación entre la ingesta de azúcares y la caries sigue estando presente igualmente (4).
La conexión azúcar y deterioro dental
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La bacteria que se aloja en la boca utiliza los carbohidratos como alimento. Al reducir el consumo de azúcar y otras fuentes de azúcares simples que se fermentan fácilmente, se reduce el riesgo de caries dental.
Limite el consumo de azúcares añadidos en su alimentación al leer las etiquetas alimenticias para determinar la cantidad de azúcar añadida a lo que se dispone a consumir. Debido a que los alimentos listados en la etiqueta se encuentran en orden por peso descendente, si uno de los siguientes ingredientes se encuentra entre los tres primeros, seguro que el alimento cuenta con elevado contenido de azúcar.
Diferentes nombres para el azúcar añadido:
- Azúcar
- Azúcar morena
- Glucosa
- Dextrosa
- Caña de azúcar
- Azúcar en polvo
- Azúcar turbinada
- Azúcar sin refinar
- Endulzantes de maíz
- Jarabe de maíz
- Azúcar de caña cristalizada
- Maltosa
- Fructosa
- Sacarosa
- Jugo de caña evaporada
- Jugo de fruta
- Miel
- Jarabe de maíz elevado contenido de fructosa
- Azúcar invertido
- Jarabe
- Jarabe de malta
- Jarabe de maple
- molasas
Hábitos saludables para prevenir la caries
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- Cepillarse los dientes dos veces al día durante dos minutos para remover azúcares y residuos alimenticios de los dientes. Pasar el hilo dental entre cada uno de los dientes para asegurarse de que no quedan residuos.
- Evite en la medida de lo posible comer entre comidas.
- Reduzca el consumo de azúcares añadidos al mínimo en su alimentación y prefiera alimentos y bebidas saludables.
- Incluya proteínas como quesos curados y huevos o kéfir y yogurt (si no tiene intolerancia a los lácteos) con toda su grasa, verduras de hojas verdes, frutas como arándanos azules, fresas, frambuesas, guayaba. Así mismo agua, ya que todos juegan un papel importante en su salud dental.
- También es buena idea enjuagarse la boca después de tomar bebidas azucaradas o que puedan teñirlos dientes como ocurre con el café o el vino.
Por otra parte, los tipos de azúcar ingeridos a través de la dieta también influyen en la aparición de enfermedades. De hecho, los estudios sobre el pH de la placa dental han demostrado que la lactosa produce menos acidez en comparación con otros azúcares.
Un estudio finlandés de 1970 sobre un cambio dietético supervisado reveló que, en una población adulta, la sustitución casi total de la sacarosa en la dieta por xilitol determina una reducción del 85% de las caries en un periodo de 2 años; su mecanismo de acción reside en la inhibición del crecimiento del Streptococcus mutans, el microorganismo más importante responsable de la formación de caries. (5)
Horarios de alimentación para tener en cuenta
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Una dieta que promueva una buena salud bucodental no sólo tiene que ver con los alimentos que se comen o se evitan, sino que también es importante cuándo y cómo se comen. Una forma de proteger los dientes es comer alimentos crudos al final de las comidas. Estos alimentos ayudan a limpiar los dientes y a masajear las encías, además de generar más saliva para eliminar las partículas de alimentos que quedan después de la comida.
Según un artículo de la Universidad de Illinois, USA,"la secuencia de los alimentos, o el orden en que se consumen los alimentos y las bebidas, es importante y puede ayudar a prevenir las caries. Intentar consumir alimentos que neutralicen el ácido después de una comida dulce o un postre evitará los ataques prolongados de ácido a los dientes y, por tanto, ayudará a prevenir las caries. Los mejores ejemplos son la leche, el té o café sin azúcar o el queso". (6)
finalmente, asegúrese de beber mucha agua entre las comidas para ayudar a eliminar los azúcares y ácidos que quedan de los aperitivos y las comidas. Aquí encuentra el sistema de agua que le recomiendo luego de una amplia investigación:
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