Hongos mágicos: Los hongos psilocibios como tratamiento para enfermedades mentales

 

 

Parte 3. Hongos mágicos

Últimamente, se está hablando mucho de la psilocibina, un compuesto alucinógeno presente en ciertos tipos de hongos o setas, como procedimiento psicodélico para tratar afecciones como la depresión y el TEPT (trastorno de estrés post traumático) cuyas terapias, al hacerse bajo una cuidadosa supervisión, están demostrando ser prometedoras.

Actualmente, grandes centros de investigación como el Centro para la Neurociencia de los Psicodélicos del Hospital General de Massachusetts, están investigando la psilocibina como terapia para la depresión resistente al tratamiento convencional, ya que los psicodélicos pueden ser útiles para facilitar nuevas conexiones neuronales.

 

¿Qué sucede en el cerebro al consumir hongos psilocibios?

En un reportaje de junio 2022, en CNN, la periodista Sandee LaMotte señala en la entrevista que, según Matthew Johnson, profesor de psicodelia y conciencia en la Escuela de medicina de la universidad Johns Hopkins,

"Cuando alguien toma psilocibina, vemos un aumento general de la conectividad entre áreas del cerebro que normalmente no se comunican bien". "También se observa lo contrario: redes locales del cerebro que normalmente interactúan bastante entre sí, de repente se comunican menos".

Según David Nutt, director de la Unidad de Neuropsicofarmacología de la División de Ciencias del Cerebro del Imperial College de Londres, se crea un "cerebro muy, muy desorganizado", que en última instancia rompe los límites normales entre las secciones auditiva, visual, ejecutiva y del sentido del yo de la mente, creando así un estado de "conciencia alterada". 

Y es esa desorganización la que, en última instancia, resulta terapéutica, pues, según Nutt: "Las personas deprimidas son continuamente autocríticas, y no dejan de machacar, repitiendo una y otra vez los mismos pensamientos negativos, ansiosos o temerosos".

"Los psicodélicos interrumpen eso, y por eso la gente puede ver de repente una salida a su depresión durante una sesión". Los pensamientos críticos son más fáciles de controlar y el pensamiento es más flexible. Por eso la droga es un tratamiento eficaz para la depresión", según Nutt. (fuente)

Aunque la psilocibina se está utilizando en ciertos entornos de investigación específicos y tratamientos, en los Estados Unidos es una sustancia de la Lista 1, es decir, no es legal su uso personal, según la Administración para el Control de Drogas.

 

Beneficios de los hongos psilocibios

• Fomentarían la creatividad gracias a la estimulación de las células madre a través de la neurogénesis partiendo de las células del entorno, lo que incrementa la inteligencia, creatividad, paz pues, según Stamets, los hongos psilocibios cambian orgánicamente la mente.

Parece que los psicodélicos ayudan a las neuronas del cerebro a brotar nuevas dendritas, aumentando la conexión entre las células. Según David Nutt,

"Estas drogas pueden aumentar el crecimiento neuronal, aumentar esta ramificación de las neuronas, aumentar las sinapsis. Eso se llama neuroplasticidad".

“Esto es diferente de la neurogénesis, que es el desarrollo de nuevas células cerebrales, normalmente a partir de células madre del cuerpo. El crecimiento de las dendritas ayuda a construir y luego a solidificar nuevos circuitos en el cerebro, lo que nos permite, por ejemplo, establecer más vías positivas a medida que practicamos la gratitud”

Ha de saberse que los ISRS (inhibidores específicos de recaptación de serotonina por su sigla en inglés) también aumentan la neuroplasticidad, aunque, en un ensayo controlado aleatorio de fase 2 de 2022 en el que se comparó la psilocibina con el Escitalopram, un ISRS tradicional, Nutt descubrió que este último no provocaba la misma “magia”.

Según Nutt, "el ISRS no aumentó la conectividad cerebral y, de hecho, no mejoró el bienestar tanto como la psilocibina. Ahora, por primera vez, la ciencia del cerebro se alinea con lo que los pacientes dicen después de un viaje: 'Me siento más conectado. Puedo pensar con más libertad. Puedo escapar de los pensamientos negativos y no me quedo atrapado en ellos'. "(fuente)

• Han demostrado aliviar de manera efectiva la depresión resistente a tratamiento convencional. Según el farmacólogo Brian Roth, profesor de psiquiatría y farmacología de la Universidad de Carolina del Norte en Chapel Hill,

“Los psicodélicos como la psilocibina y el LSD entran en el cerebro a través de los mismos receptores que la serotonina, la hormona del "bienestar" del cuerpo. La serotonina ayuda a controlar funciones corporales como el sueño, el deseo sexual y estados psicológicos como la satisfacción, la felicidad y el optimismo.

Las personas con depresión o ansiedad suelen tener niveles bajos de serotonina, al igual que las personas con trastorno de estrés postraumático, jaquecas, anorexia, adicción al tabaco y abuso de sustancias. El tratamiento suele consistir en inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina, o ISRS, que aumentan los niveles de serotonina disponibles para las células cerebrales. Sin embargo, los expertos afirman que pueden pasar semanas hasta que se produzca una mejora, si es que los fármacos funcionan.

Sin embargo, con psicodélicos como la psilocibina y el LSD, los científicos pueden observar cambios en la conectividad de las neuronas del cerebro en el laboratorio "en 30 minutos". (fuente)

• Dejar de fumar y otras adicciones. Según el doctor Matthew Johnson, profesor de psiquiatría y ciencias comportamentales de la escuela de medicina de la universidad Johns Hopkins la psilocibina tiene el potencial para tratar trastornos del consumo de sustancias, incluyendo alcohol y cocaína.

• Malestar psicológico ligado al cáncer. Un experimento realizado en Johns Hopkins en 2016, encontró que una dosis única de psilocibina sustancialmente mejoró la calidad de vida y disminuyó tanto depresión como ansiedad en personas diagnosticadas con cánceres mortales.

• Para tratar jaquecas. Según una investigación realizada en 2017, las sustancias psicoactivas como la psilocibina ayudarían a aliviar cefaleas de racimo y migrañas. (fuente)

 

Uso de la psilocibina desde tiempos ancestrales

Personalmente, con esta investigación, me ha llamado la atención aprender que los hongos psilocibios crecen a lo largo y ancho del planeta, con ligeras diferencias en su aspecto, pero con la misma potencia medicinal.  Incluso, se ha llegado a especular que los psilocibios serían como una especie de eslabón perdido gracias al cual, pasamos de homínidos a ser humanos inteligentes. (fuente)

En el artículo The Stoned Ape Hypothesis: Did Magic Mushrooms Influence Human Evolution? El autor, Robert Lamb cita a Dennis McKenna, autor de “Food of the Gods”, quien plantea que,

“se sabe que la talla del cerebro ha incrementado el triple en tamaño, desde hace 2 millones de años, y probablemente los ecosistemas que reúnen a homínidos, ganado y hongos tenían esa edad” refiriéndose a los mojones de donde emergen los hongos psilocibios.

Según el doctor Thomas Falk, profesor de filosofía y educación de la universidad de Dayton, la hipótesis proporciona una explicación de la supuesta “explosión creativa” ocurrida hace 40,000 años durante el período Homo Sapiens, previo a la migración de África hacia Europa. Es allí donde se percibe un aparente salto en la habilidad cognitiva humana.

“Por primera vez estos humanos vivieron en mundos de su propia creación, de manera simbólica y material.  Fueron capaces de crear mundos en sus mentes y recrear esos mundos en ambientes externos tanto físicos como sociales.”

“Aunque otras especies de Homo habrían aprovechado la naturaleza de forma eficiente, se mantuvieron pasivos.  La clave para esta principal distinción entre Homo sapiens sapiens y todos los otros homínidos parece ser el lenguaje.”

El texto “Alimento de los dioses” de Terence McKenna fortalece este argumento con base en las sobresalientes cualidades de la experiencia psicodélica (tal como empatía y percepción sensorial incrementadas), tradiciones chamánicas en culturas ancestrales, y el reconocido e hipotético rango de plantas psicodélicas y hongos en tiempos antiguos, plantea Lamb.

 

Uso indígena e histórico

La atención moderna hacia la psilocibina empieza con el descubrimiento de las ceremonias Aztecas durante la colonización española.  Es complejo determinar cuándo o dónde se iniciaron estas tradiciones, aunque algunos investigadores calculan que las prácticas religiosas que involucraban hongos psilocibios sucedieron en la valle de Méjico y el resto de América central hace unos 3500 años.[1]

 

Uso de los hongos psilocibios en la actualidad

Hoy, las farmacéuticas están tratando de implementar la psilocibina en cápsulas durante una sesión en que el(la) paciente se acuesta en una camilla, con los ojos cubiertos con un antifaz y utilizando audífonos con una música escogida, mientras la persona que facilita la sesión, le toma de la mano.

Sin embargo, según Paul Stamets, la gente prefiere consumirlo dentro del ámbito ceremonial, donde la persona que conduce la ceremonia también los consume y asiste a los participantes, al estilo de la chamana mexicana María Sabina, con sus cantos de invocación, música y eventualmente, según la necesidad, una curación. Esto evidentemente potencia los efectos de la psilocibina.

 

La ceremonia Mazateca con hongos psilocibes o “teonanacatl”

 

El texto ELSI Research Report: State Regulation for Psilocybin: Recommendations for the Oregon Heath Authority menciona un foto reportaje publicado en la revista LIFE en 1957, donde Robert Gordon Wasson, un banquero y micólogo aficionado norteamericano describe una ceremonia dirigida por la curandera mazateca María Sabina y su hija:

En el reportaje Wasson relata una velada con una mezcla de elementos cristianos y pre-cristianos. “La ceremonia tuvo lugar en la noche, casi en total oscuridad, ante un altar sencillo adornado con imágenes católicas en el sótano o subsuelo, como una habitación ceremonial dentro de una casa privada.  Según Wasson, 20 participantes llegaron ataviados con sus mejores prendas y, como los aztecas, empezaron la ceremonia bebiendo chocolate.  Había niños presentes, aunque no participaron en la ceremonia.

Luego de que María Sabina y su hija limpiaron los hongos, los pasaron por el humo del incienso de resina de copal y enseguida, las curanderas entregaron a los participantes tazas con sus dosis personales.  Wasson y su fotógrafo recibieron 6 pares de hongos cada uno.  Las curanderas 13 pares cada una.  Luego, con un solemne canto en su lengua nativa, María Sabina empezó su invocación del espíritu de los hongos en el nombre de Cristo y los santos antes de recitar sus buenas intenciones y luego, de manera impaciente suplicando a los espíritus: Son un boca que los busca, pero ustedes no me atienden. ¡Vengan!”

Las setas de psilocibina a las que se referían como peligrosas, nunca las comían frívolamente y nunca las vendían en el mercado. Según Wasson, la congregación es indispensable para el rito, aunque esto no significa que las setas pierdan su potencia si no se comen junto con otras personas.

Los mazatecos utilizaban los hongos de una manera particularmente terapéutica, no como una cura sino más bien como una manera de determinar "lo que llevó a la enfermedad y si el paciente vivirá o morirá, y lo que debe hacerse para acelerar la recuperación".  Por ejemplo, al ingerir los hongos, los curanderos informaron que podían aprender la ubicación de las hierbas silvestres que podían encontrar y aplicar a sus pacientes.  Los mazatecos también consultan los hongos para obtener información sobre cuestiones no relacionadas con la salud.  A veces, una ceremonia o "Velada" es solicitada por alguien que desea consultar a los hongos sobre una grave preocupación familiar. [2]

 

¿Cómo reacciona el cuerpo una vez que consume hongos psilocibios?

Los siguientes son los efectos al consumir hongos psilocibios durante una ceremonia:

• Aumento de la energía positiva.
• Sensación de bienestar y satisfacción.
• Visión del mundo desde una perspectiva diferente.
• Alteración en la percepción del espacio-tiempo.
• Sentimiento de unidad con el universo. Sentimiento de que somos uno con cada ser viviente.
• Percepción musical incrementada

 

¿Estamos listos para un cambio de paradigma?

 

Estas medicinas y sustancias son una puerta a una dimensión mayor y obviar la fase ceremonial o lo que aporta la forma tradicional de uso por parte de los indígenas, estancaría o por lo menos, haría incompleta la sanación de aquellos pacientes que van en busca de ella.

Los hongos psilocibios ofrecen más componentes que una molécula farmacéutica que puede ser efectiva contra las enfermedades. 

En palabras de Françoise Bourzat, “en la tradición mexicana la comunión con esta medicina entabla una relación con los ancestros, las personas que ya han fallecido, con el otro lado del velo”.

Al encontrarse en el espacio de la medicina, según Bourzat, María Sabina y esta tradición se han convertido en un aliado no solo para personas con problemas de depresión o síndrome de estrés post- traumático, o alcoholismo, entre otros; sino para personas que se encuentran en malestar psicológico al final de la vida.

 

Uso controlado y bajo la supervisión de un(a) terapeuta o guía ceremonial

La psilocibina afecta al sistema cardiovascular y podría provocar un aumento de la presión arterial o de los latidos del corazón.

Por estas razones, actualmente se recomienda que la psilocibina sea administrada en una clínica por médicos o terapeutas especialmente formados con dichos fines. No debería estar disponible en la calle, donde la gente puede venderla o tomar demasiado, o tomar demasiadas pastillas de una prescripción médica. Incluso, no debería utilizarse fuera de un ámbito ceremonial.

¿Cuánto duran los resultados?

 

En los estudios realizados hasta ahora, el profesor Nutt señala que “depende del organismo de cada persona: a dos les ha funcionado por ocho años con una sola sesión de psilocibina”.  Sin embargo, personas con depresión crónica pueden volver a tener síntomas pasados 12 meses, según la doctora Natalie Gukasyan de Jonhs Hopkins. (fuente)

Con pacientes crónicos aún se estudia la posibilidad de administrar otra dosis de psilocibina o volver a utilizar los ISRS una vez que mejore el ánimo para mantener la depresión controlada.

Aunque la genética puede desempeñar un papel en muchos trastornos mentales, debido a que en algunos casos los receptores de serotonina presentan variaciones, es poco probable que el ADN de una persona sea el único factor que influya en la respuesta a los tratamientos psicodélicos.

La forma en que una persona responde al tratamiento psicodélico también puede incluir su disposición para participar en la psicoterapia, la disposición que tenga de ser compasiva consigo misma, así como la gravedad de su trauma y la etapa temprana de su vida en que se inició.

Estos factores no solo afectan un tratamiento de salud mental, sino cualquier tratamiento. Pero especialmente en este, es crucial la disposición de la persona al someterse a un procedimiento que altera su consciencia y es porque una vez que esa persona ha tomado la decisión de sanarse, 80% de la curación ya ha tenido lugar.

 

Referencias

[1] Francisco J. Carod-Artal, Hallucinogenic Drugs in Pre-Columbian Mesoamerican Cultures, 30 NEUROLOGIA 42 (2015). See also Ralph Metzner, Visionary Mushrooms of the Americas, in SACRED MUSHROOM OF VISIONS: TEONANÁCATL 11 (2004) (discussing the miniature mushroom stones, some of which date back to 1000 BCE, that have been found in the lands of the ancient Maya in Guatemala, Ecuador, and Southern Mexico and noting that they are currently understood to be effigies of a mushroom deity).

[2] Harvard Law School. Project on Psychedelics Law and Regulation (POPLAR) at the Petrie-Flom Center for Health Law Policy, Biotechnology, and Bioethics.12-12-2021.