Qué es y por qué importa el equilibrio del estrógeno en el cuerpo

 

 

Los estrógenos son hormonas esenciales para la salud de todas las partes del cuerpo, desde los ojos, hasta el corazón, cerebro y todo el compendio de nuestro fantástico ser.

Si le preocupa la relación entre el estrógeno y el cáncer de seno, es verdad que el estrógeno estimula el crecimiento de células cancerígenas y así su riesgo, pero no debemos quedarnos ahí ya que necesitamos el estrógeno para vivir y por ello, hoy le muestro por qué y cómo se mantiene ese sutil equilibrio y así, disfrutar de una vida más plena.

 

El tango entre estrógeno y progesterona

Efectivamente es como una danza donde los pasos que dé uno de los integrantes, afecta el movimiento y comportamiento del otro.  La progesterona y el estrógeno se oponen la una al otro para lograr el balance u homeóstasis, sin embargo, si usted tiene demasiado estrógeno y muy poca progesterona, el cuerpo ya no funciona en perfecta homeóstasis.  La progesterona actúa para equilibrar las acciones del estrógeno.  Mientras el estrógeno es asociado a varios tipos de cáncer, la progesterona tiene efectos anticancerígenos.

El estrógeno también promueve la retención de líquidos mientras que la progesterona es un diurético natural y esta es una de las razones por las cuales, las mujeres que tienen niveles bajos de progesterona tienen mayores síntomas de SPM (síndrome pre-menstrual).  Cuando no existe oposición al estrógeno debido a los niveles bajos de progesterona, se incrementa el riesgo de desarrollar cáncer.

Pero culpar al estrógeno es como culpar a las niñas en una fiesta.  Si hay 10 niñas en la fiesta y solo 5 chicos, no es culpa de ellas que la mitad se queden sin parejo para bailar.  Podría invitarse menos niñas a la fiesta, pero ¿no tendría más sentido invitar más chicos al baile?

De igual forma, si los niveles de estrógenos están normales o más bajos de lo normal, ¿tendría sentido reducir los niveles de progesterona? De hecho, lo ideal sería incrementar los niveles de progesterona para igualarlos a los de estrógenos y que se mantenga el equilibrio.  Al incrementar la fuerza opositora de la progesterona, el efecto potencialmente tóxico del estrógeno disminuye.

 

La ciencia detrás de la progesterona, los estrógenos y las enfermedades degenerativas

Los estrógenos han demostrado activar el gen BCL2 que, a niveles elevados, provoca el crecimiento rápido y agresivo de células cancerígenas, por ejemplo.

Por otro lado, la progesterona incrementa la expresión de los genes P53 o tumor-supresores, también conocidos como “guardianes del genoma” debido a su capacidad para prevenir mutaciones del ADN y de incluso, inducir la “apoptosis” o autodestrucción de células cancerígenas.

Los niveles elevados de genes BCL2 estimulan el crecimiento de células cancerígenas, incrementando el riesgo de adquirir una enfermedad degenerativa.  La progesterona contraataca las acciones del gen BCL-2 al estimular la producción del gen P53, provocando la autodestrucción de células cancerígenas.  Un ejemplo ha sido cómo en pruebas de laboratorio la progesterona ha inducido la muerte celular de una línea de células cancerígenas invasivas en el seno. 

Así que, si los estrógenos estimulan la elevación de genes BCL-2 y la progesterona la producción de P53, ¿por qué no enfocarnos en una buena producción de P53? Ya verá que se puede.

 

Nuestro alimento puede ayudar a cambiar nuestro comportamiento genético

Un ya fallecido y reputado oncólogo, Mitchell Gaynor, será recordado por sus explicaciones de cómo podemos cambiar el comportamiento de nuestros genes según nuestras elecciones alimenticias. 

Según el doctor Gaynor, el resveratrol presente en uvas rojas y vino rojo (orgánico) puede activar el gen P53.  El resveratrol pertenece a un grupo de compuestos vegetales llamados polifenoles que parecen tener propiedades antioxidantes y protegen el cuerpo disminuyendo el riesgo de cáncer y enfermedad cardiaca.  

 

Las crucíferas, especialmente los berros, pero también la coliflor, repollo, acelga china, brócoli y coles de Bruselas (por su alto contenido natural del compuesto anticancerígeno Isotiocianato de fenilo).

Además, hierbas como la salvia, el romero, el jengibre, la cúrcuma y la ashwagandha (o gingseng hindú) también cuentan con una elevada estimulación del gen P53.

La vitamina C es otra gran promotora de P53, por lo que las terapias intravenosas de altas dosis con vitamina C son tan efectivas para las enfermedades degenerativas.  Contrariamente, los inhibidores de la P53 se encuentran en alimentos procesados, harinas y azúcares refinadas.

Resumiendo, los alimentos estimulantes del gen P53 son:

• Las verduras crucíferas
• El resveratrol
• Hierbas aromáticas como salvia, romero, albahaca, tomillo, jengibre, cúrcuma y ashwagandha
• Ácidos grasos esenciales como Omega-3
• Regaliz
• Muérdago
• Vitamina D
• Selenio
• Vitamina C

 

No todos los estrógenos son iguales

Estrógenos es un término generalizado para determinar varios tipos de hormonas en el cuerpo como el estriol, estrona y estradiol.  El estriol es un estrógeno débil que no promueve las enfermedades degenerativas.  De hecho, puede ser un protector ya que equilibra los efectos nocivos de la estrona y el estradiol.  La estrona es más fuerte, mientras que el estradiol es el más fuerte y desafortunadamente, el que más predomina entre los estrógenos que ocurren de forma natural.

En mujeres pre-menopáusicas, el estrógeno se produce de forma natural en los ovarios, glándulas adrenales y tejidos grasos.  Durante la menopausia, la producción de estrógenos disminuye en un 50% y es producida principalmente por las glándulas adrenales y las células grasas.  Cuando el cuerpo está en equilibrio hormonal, la progesterona se opone al estrógeno, manteniéndolo en balance.  Cuando tenemos más estrógeno del que se necesita en comparación a la progesterona, hay un dominio de estrógeno.  Incluso una persona con niveles bajos de estrógeno puede ser estrógeno-dominante si no está produciendo suficiente progresterona.

 

Los causantes de la deficiencia de progesterona en el organismo

Como podrá imaginar, tanto la deficiencia de progesterona como las enfermedades degenerativas eran poco comunes antes de la revolución industrial.  Cuando la gente consumía alimentos integrales, sin pesticidas ni adición de hormonas y antes del advenimiento del uso extendido de químicos. Los productos industriales que tienen estructuras químicas similares al estrógeno, “engañan” al cuerpo y desequilibran la homeóstasis.

Es imperativo evitar los Xenoestrógenos

Los xenoestrógenos son sustancias derivadas de la industria.  Por ejemplo, el bisfenol A que es el más común y se absorbe a través de la piel, lo encontramos en botellas de plástico, cajas de plástico para guardar comida, chupos, los recibos de supermercado, resinas con las que se pintan las latas de comida y bebida, los biberones.  Los Parabenos, en productos de aseo tanto de hogar como personal, champús, desodorantes, geles; los Ftalatos o BPA, presente en los juguetes tanto infantiles como eróticos.

Los niveles bajos de progesterona pueden resultar de una función adrenal deficiente, disfunción tiroidea o un mal funcionamiento del hígado.  Vale la pena notar que el gluten, presente en el trigo, centeno y cebada puede también afectar el buen funcionamiento de la tiroides y las glándulas adrenales pues, los productos que lo contienen, bloquean la absorción de importantes nutrientes para el organismo.

Los xenoestrógenos no son biodegradables, se mantienen almacenados en las células grasas (el tejido de los senos está compuesto principalmente de células grasas).  Mientras que el hígado puede desintoxicar el organismo de estrógenos naturales, no lo puede lograr con el bombardeo diario de estrógenos provenientes de sintéticos y químicos.

 

Obesidad

La obesidad influye en la hiperestrogenia ya que los estrógenos promueven el crecimiento de los tejidos sensibles a ellos como el adiposo, es decir, la grasa que se concentra en cintura, vientre, caderas y muslos, así como en la parte posterior de los brazos.  Así mismo, tratamientos con píldoras anticonceptivas, dietas desbalanceadas o que incluyan mucha soya (rica en estrógenos vegetales naturales).  Aquí llegamos al tema de la “grasa rebelde” pues, es un círculo vicioso ya que los estrógenos promueven su aumento y ésta, el de ellos, así que ninguna dieta ni ejercicio puede contrarrestarla.

 

Tanto hombres como mujeres están sujetos a padecerla

Aunque somos las mujeres quienes estamos más propensas por ser los estrógenos nuestras hormonas sexuales, los hombres, debido al estilo de vida de este tiempo, son cada vez más vulnerables.

Una de las señales de este exceso es el adelanto de la primera menstruación en las niñas: actualmente se produce 5 años antes en comparación de cómo era hace 50 años. Es decir, actualmente les llega a los 10-11 años, mientras que, en antaño, llegaba a los 14-15 años de edad.  

De otra parte, la aparición de enfermedades degenerativas a una edad más temprana con diferentes tipos de cáncer (mama, útero, ovarios, testículos) y un desarrollo anormal del pene (tamaño disminuido), de los testículos y el pecho.

El exceso de estrógenos puede estimular el desarrollo de tejidos vulnerables, como el revestimiento del endometrio, fibromas de ovario y aumento de próstata. Otras consecuencias son los cambios de humor, grasa difícil de “quemar”, fatiga, alergias, sinusitis recurrentes y más.

 

Los fitoestrógenos o anti-estrógenos

Normalmente, la medicina alopática los tiene relegados al mismo grupo de los estrógenos, pero en realidad, son más útiles de lo que se piensa.

Los fitoestrógenos son estrógenos vegetales que pueden actuar como anti-estrógenos al reducir la actividad estrógena en el cuerpo y protegerlo del estradiol (el estrógeno más fuerte) así como de los xenoestrógenos que se encuentran en los químicos ambientales.  De hecho, contienen compuestos que han demostrados reducir el crecimiento y propagación de células cancerígenas.

Los fitoestrógenos tales como los lignanos, presentes en las semillas de linaza, actúan más como bloqueadores de estrógeno que como estrógenos pues, ayudan a modular la producción, disponibilidad y actividades hormonales.

 

Cómo controlar niveles elevados de estrógeno

En mujeres con superabundancia de estrógeno natural (como resultado de exceso de toxinas en el organismo y estrés crónico), les puede ayudar reducir los niveles de la enzima aromatasa o sintetasa, o estrógeno sintasa que es la enzima encargada de la producción de estrógeno.

No es necesario, sin embargo, confiarse de los inhibidores de aromatasa que se consiguen en farmacia.  Alimentos como champiñones, semillas de calabaza y de linaza ayudan a controlar la producción de esta enzima.

El Diindolilmetano es un suplemento que modula el metabolismo de estrógenos y se está utilizando para proteger contra el cáncer de colon, útero y seno.  El diindolilmetano se produce cuando se digiere la sustancia indo-3-carbinol que se encuentra principalmente en el brócoli.

El Calcio –D- glucarato es similar al ácido glucárico que se encuentra de manera natural en nuestros cuerpos.  También presente en naranjas, manzanas, coles de Bruselas, brócoli y repollo.  El Calcio-D-Glucarato se usa para remover agentes tóxicos y hormonas esteroides del organismo.

Finalmente, no se trata de reducir los niveles de estrógenos del organismo, la idea es identificar y tratar la causa del desequilibrio hormonal o niveles elevados de estrógeno al eliminar los xenoestrógenos, estimular la producción natural de progesterona, reducir el estrés y hacer los cambios adecuados en cuanto a la alimentación y el estilo de vida para restablecer el balance hormonal y mejorar la salud.

 

Alternativas para restablecer la homeóstasis hormonal

• Consumir fitoestrógenos: aunque un poco difíciles de absorber debido a que pueden actuar cómo estrógenos o, como antagonistas.  Los fitoestrógenos más conocidos son los “isoflavonoides” que se encuentran en la soya que, aunque antes se consideraba un súper alimento, la verdad es que es mejor evitarla.

Los fitoestrógenos pueden bloquear a los estrógenos que promueven el cáncer adhiriéndose a los receptores de estrógenos en las células mamarias.  Así mismo, detienen el crecimiento tumoral, previenen la metástasis y sellan vasos capilares nuevos en tumores crecientes.  La soya fermentada, como el Tempeh y el miso han de preferirse sobre las versiones no fermentadas como el tofu, ya que el proceso de fermentación incrementa la actividad de eliminación de radicales libres.

Además, la fermentación remueve el efecto bloqueador de nutrientes que puede tener la soya.  Por ejemplo, la soya no fermentada puede bloquear la absorción de minerales importantes como magnesio y zinc.

La soya altamente procesada (proteína aislada de soya o concentrado de soya) y que se añade a muchos alimentos procesados debe evitarse ya que bloquean fuertemente la absorción de nutrientes.  Debido a que la mayoría de la soya es genéticamente modificada, se recomienda consumir solamente soya orgánica y fermentada.

Los fitoestrógenos conocidos como lignanos presentes en las semillas de linaza modulan la producción, disponibilidad y actividad hormonal.  Los lignanos disminuyen la producción de estrógenos al bloquear la enzima Aromatasa que los produce.  Así mismo, bloquean los receptores estrógenos de manera similar al Tamoxifen, un medicamento recetado para prevenir el cáncer de mama.

Cuando se consumen lignanos, la bacteria intestinal los convierte en estrógenos frágiles.  Estos estrógenos se auto adhieren a los receptores de estrógenos, estimulándolos débilmente y bloqueando su adhesión.  De forma similar, los lignanos bloquean toxinas ambientales, haciendo que el tejido mamario se vuelva más resistente a estas toxinas.

• Tomar un suplemento de vitamina E es crucial para mantener un equilibrio saludable entre la progesterona y el estradiol.

• Tomar un suplemento de Magnesio que es otro nutriente muy importante para incrementar los niveles de progesterona ya que juega un papel importante en mantener el equilibrio hormonal del cuerpo.

• Consumir alimentos integrales de buena calidad que se logra con alimentos a base de plantas para fortalecer la actividad de las glándulas adrenales y estimular el buen funcionamiento del organismo.

• Actividad física que le ayuda a reducir el estrés y afecta de manera positiva la expresión genética. Ayuda restablecer el equilibrio hormonal.

• Limpiar armarios y estanterías remplazando los productos sintéticos de aseo y cuidado tanto personal como de hogar por alternativas no tóxicas y biodegradables. Mis recomendaciones en Colombia: Biogar.

• Reducción de estrés pues, el estrés vulnera la función adrenal y altera directamente el ADN, sin mencionar que eleva significativamente los niveles de estrógenos al tiempo que merma los de progesterona. Actividades como el yoga, la meditación, la oración y otras terapias que incorporen mente-cuerpo ayudan a liberar emociones negativas y aliviar recuerdos traumáticos. Revise mis blogs para encontrar la actividad que más se adapta a sus necesidades.

• Beber líquidos limpios y no me canso en reiterar la importancia del agua filtrada y potencializada (Nikken es mi recomendación) sin cloro, ni flúor, ni toxinas como las que encontramos en el agua de la llave. Evitar el alcohol, pero si va a beber vino rojo, que sea orgánico y sin exagerar.  Recuerde que su hígado debe procesar el alcohol y si bebe demasiado, no será capaz de metabolizar el estrógeno de manera eficiente.

• Probióticos fortalecen la bacteria del colon mejorando la digestión y ayudando a prevenir el estreñimiento. Esto es importante pues si las heces permanecen en el intestino por mucho tiempo, el excedente de estrógenos se reabsorbe y empiezan a circular de nuevo en el organismo.  Además, la función inmunológica depende de un intestino saludable, clave en la prevención de enfermedades degenerativas.

  

Referencias

Información con base en los artículos

 La verdad acerca del estrógeno y cáncer de seno de Elyn Jacobs

¿Demasiados estrógenos? De Carmen Sabalete