Aunque los sueños lúcidos parezcan una fantasía o ficción, se trata de una experiencia muy real para muchas personas, respaldada por la ciencia y la psicología. El sueño lúcido es principalmente un mecanismo que tiene lugar en la corteza prefrontal del cerebro y se produce cuando la persona que sueña es consciente de que está soñando mientras se encuentra en pleno estado de sueño.
El sueño lúcido está asociado a la consciencia y a la reflexión de esta consciencia, por ello, a menudo se la asocia con lo que se conoce como metacognición. La metacognición se refiere a la capacidad de las personas para reflexionar sobre sus procesos de pensamiento y la forma en que aprenden.
Investigaciones realizadas hasta ahora sugieren que el sueño lúcido y las funciones metacognitivas comparten sistemas neuronales similares. Esto indicaría que las personas con mayor capacidad de controlar sus pensamientos tienen más probabilidades de experimentar sueños lúcidos.
Al igual que los sueños normales, los sueños lúcidos ocurren durante la fase de sueño REM (Rapid Eye Movement por su sigla en inglés) y que se caracteriza por el movimiento rápido de los ojos, ausencia de tono muscular en el cuerpo y la tendencia a soñar.
¿Por qué soñamos?
Experimentos del doctor Mark Blumberg, neurocientífico de la Universidad de Iowa, Estados Unidos, y quien ha estudiado la fase REM del sueño desde finales de los 90s, nos pueden dar unas claves importantes, como lo menciona en artículo para la revista The New Yorker.
Blumberg y su equipo de laboratorio extirparon quirúrgicamente el córtex de bebés ratas -la región del cerebro implicada en las imágenes visuales y la experiencia consciente, donde se creía que se originaban los sueños- dejando intacto sólo el tronco encefálico, que controla las funciones corporales subconscientes. Las crías dormidas seguían crispándose exactamente igual que antes de la intervención quirúrgica. "Era imposible que las sacudidas fueran un subproducto de los sueños".
"Se les asignó un sonido distinto a cada neurona del cerebro desde la que grabamos", ha explicado. En un vídeo que ha registrado el experimento, la pata ha empezado a temblar y, con cada sacudida, resonaban notas musicales de distintas neuronas del cerebro. El efecto era como el de un órgano de iglesia tocando bajo el agua; los acordes sonaban y luego se apagaban. La lectura de los electrodos dejaba claro el orden de los acontecimientos: primero se movía el cachorro y luego respondía el cerebro. Las sacudidas iban seguidas de ráfagas de actividad en el córtex sensoriomotor, que coordina el movimiento y las sensaciones. El cuerpo y el cerebro no estaban desconectados. El cerebro escuchaba al cuerpo.
En una serie de artículos, Blumberg expuso su teoría de que el cerebro utiliza el sueño para "aprender" del cuerpo. Uno no pensaría que el cuerpo es algo que un cerebro necesita aprender, pero no nacemos con mapas de nuestros cuerpos; no podemos serlo, porque nuestros cuerpos cambian cada día, y porque el cuerpo en el que acaba convirtiéndose un feto puede diferir del codificado en su genoma. "Los bebés deben aprender sobre el cuerpo que tienen", no el cuerpo que se supone que deberían tener".
En mis reflexiones, se me ocurre si padecemos alguna enfermedad, o tenemos una lesión, durante el sueño, esa parte del cuerpo que se encuentra afectada puede mostrarle al cerebro cómo tratarla y el sueño lúcido podría ser una herramienta valiosa para ello.
¿Para qué tener sueños lúcidos?
Cuando usted duerme y durante el sueño se da cuenta de que está soñando, al permanecer en él, este estado puede proporcionarle ciertos beneficios que tal vez puedan motivarle a cultivar esta habilidad.
- El sueño lúcido le ayuda a desarrollar una mayor consciencia.
Referirse a una persona lúcida alude a que dicha persona tiene claridad y/o es consciente.
Ser consciente de que se está soñando indica que está llevando la claridad, la consciencia que tiene en su estado de vigilia al espacio del sueño. A mí particularmente me da la posibilidad de abordar situaciones que estoy viviendo durante la vigilia desde otra perspectiva.
A veces, durante las horas de vigilia y con todas las cosas que debemos resolver al mismo tiempo, es complejo dedicarle el tiempo y la atención suficiente a algún asunto, pensamiento o emoción que nos pueda estar perturbando. El sueño lúcido permite relacionarnos con los contenidos de nuestra mente, así puede relacionarse con sus pensamientos y emociones desde otra perspectiva.
- Los sueños lúcidos le permiten entender mejor cómo funciona su mente y mejorar su forma de resolver problemas
Al tener una mejor referencia de lo que sucede dentro de nosotros, es más fácil entender cómo nos afectan las situaciones a las que nos vemos enfrentados sin que las emociones nos dominen. Nos da una ventaja sobre la manera en que reaccionaremos y responder, tal vez, de una manera más inteligente.
- Los sueños lúcidos le permiten explorar aspectos más amplios y profundos de su mente
Como lo explica Andrew Holecek de la revista en línea Kripalu, al despertar dentro de su sueño, usted puede explorar el poder de su mente para cambiar su mundo. Una vez dentro de su sueño usted desarrolla la capacidad de transformar lo que esté viviendo dentro de él: situaciones, objetos, personajes, etc., es decir, usted puede cambiar su mente y su mundo.
Esta habilidad le permite modificar su vida: transformar malos estados emocionales a otros mejores, formar estados mentales que le permitan funcionar de forma equilibrada y armónica. Esto le puede proporcionar la seguridad para cambiar de forma real su experiencia vital.
- Los sueños lúcidos pueden inducirle a mejorar su memoria
Este es un beneficio que he descubierto personalmente. Una de las formas de incitar los sueños lúcidos es a través de un diario y esta práctica le obliga a tomarse un momento cuando despierta para que escriba, si recuerda, sueños que haya tenido durante la noche. Sorpresivamente, al hacer este ejercicio, empieza usted a acordarse no de uno, sino de más sueños que hubiese podido tener esa noche y de alguna manera, esa memoria se consolida durante el día, es decir, usted puede evocarla y analizarla.
- Descubrir su poder de elección
Según Holecek, cuando usted está en un sueño lúcido, puede ver cómo se desarrolla el sueño y decidir no cambiar nada, por ejemplo. Esto es lo que se denominaría un sueño presencial: lo ve como una película sin involucrarse en él (esto lo convertiría en no-lúcido). Por otra parte, puede elegir cambiar ciertos aspectos de ese sueño para darle un mejor fin. En cualquiera de los dos casos, usted está eligiendo. Luego puede aplicar eso mismo a su vida cotidiana, pero mejor aún, porque usted ejercita el poder de cambiar de opinión, de su forma de relacionarse con las cosas, con la gente; de despertar y tomar las riendas de su vida.
- Los sueños lúcidos pueden ayudar a reducir la ansiedad
Se ha sugerido que los sueños lúcidos podrían reducir síntomas de ansiedad o de trastorno de estrés post traumático (PTSD por su sigla en inglés) debido a que durante el sueño lúcido la persona puede revisar las situaciones con cierto grado de control. Así, la persona puede aprender a tranquilizarse frente a situaciones que normalmente le causaría estrés en el mundo real.
En un estudio piloto reciente con personas que padecían trastorno de estrés post traumático, todas recibieron un taller de sueños lúcidos de una semana de duración y el 85% mostraron una disminución de los síntomas lo suficientemente significativa como para dejar de clasificarse como afectados.
Los participantes presentaban traumas muy diversos, desde abusos sexuales en la infancia hasta servicio militar y accidentes de tráfico. También se observó una disminución significativa de las emociones negativas, la frecuencia de las pesadillas y la angustia.
Pasos y estrategias para convertirse en un(a) onironauta
Solo hay un requisito para tener un sueño lúcido: darse cuenta de que está soñando. Por supuesto es más fácil decirlo que lograrlo, sin embargo, aprender cómo tener sueños lúcidos es como cualquier otra habilidad que usted decida aprender, toma tiempo, disciplina hacer unos ajustes a su estilo de vida y sueño; y constancia.
Según la revista en línea World of Lucid Dreaming, algunas personas pueden tener su primer sueño lúcido al primer intento, mientras que otras personas necesitarán semanas y a veces, hasta algunos meses antes de alcanzar la consciencia en el espacio onírico.
Enseguida encuentra algunas de los pasos imprescindibles para suscitar sueños lúcidos o por lo menos, los que me han funcionado a mí:
- Trate de dormir entre 7-8 horas durante la noche. Esto hace parte de la higiene del sueño y ayuda a que su cuerpo se disponga y se dé el espacio para que los sueños lúcidos tengan lugar.
- Se debe llevar un diario de sueños (imprescindible). Apenas se levante en la mañana usted debe escribir por lo menos un sueño que recuerde haber tenido la noche anterior. Este ejercicio es clave porque cuando usted empieza a escribir y a evocar ese sueño, pueden empezar a llegar más detalles del sueño o recuerdos de otros sueños que haya tenido durante la noche.
- Haga comprobaciones de la realidad. Varias veces durante el día pregúntese si está soñando. Esto también es clave porque cuando se encuentre en el espacio del sueño, esa pregunta va a resurgir.
- Meditación y/o ejercicios de respiración. Ambas prácticas le ayudan sentar las bases para tener sueños lúcidos porque involucran estados más elevados de consciencia (hasta la banda Gamma o 40Hz) lo que le facilita la concentración mental, la consciencia de sí mismo(a) y habituarse a la reflexión.
- Auto-prográmese para acceder conscientemente al espacio de sus sueños. Esta es una técnica híbrida entre darle la instrucción a su cerebro de tener consciencia mientras sueña y la autohipnosis que explico a continuación. Esta última le proporciona una guía paso a paso para lograr las condiciones propicias.
Según Rebecca Casale, fundadora de World of Lucid Dreaming,
“la hipnosis consiste en hacer que el cerebro entre en un trance relajado. Le hace más susceptible de lo normal. No es algo antinatural, maligno o de control mental…
…En el mundo real, la hipnosis tiene usos muy productivos en terapia y desarrollo personal. Le da la capacidad de hablar con su yo interior y programar su mente inconsciente”.
Casale sugiere 5 pasos fáciles para lograr con autohipnosis sueños lúcidos:
- Póngase cómodo(a). Busque un lugar donde sentarse o recostarse, no cruzar brazos ni piernas. Adoptar una postura abierta que pueda mantener durante 20 minutos.
Dejar que los ojos se cierren de forma natural y respirar lenta y profundamente 3 veces.
Observar los pensamientos que entran a la mente y dejarlos pasar sin interactuar con ellos.
- Liberar tensión del cuerpo. Visualice cada músculo relajándose y fundiéndose en el mueble. Suelte cada grupo muscular uno por uno.
Concentrarse en los hombros, parte superior de la espalda y mandíbula.
- Visualizar su descenso. Visualícese en lo alto de una escalera. Esto representa su consciencia. A medida que desciende los peldaños uno a uno, se adentra más en su estado de trance relajante.
Cuente los escalones, si lo desea. Intente girar suavemente los ojos hacia la cabeza y mantenga el cuerpo inmóvil.
- Emplee las autosugestiones. Una vez llegue al final de la escalera, estará listo(a) para comenzar su guion de autosugestión.
Repita suavemente una o más de las siguientes frases en su mente (escoja la que le parezca más adecuada). Por ejemplo,
“Puedo recordar mis sueños”
“Puedo tener sueños lúcidos”
“Puedo estar consciente en mis sueños”
Repita la afirmación que haya elegido tantas veces como quiera.
- Despierte suavemente. Cuando esté preparado(a), alístese para salir del trance. Dígase a sí mismo que va a contar hasta 10, y que con cada paso volverá lentamente a la conciencia plena. Luego cuente hacia arriba mientras sube los escalones en su mente.
Respire hondo cuando llegue arriba y abra los ojos. Siéntese un momento si quiere, y recuerde levantarse despacio.
Consejos útiles para propiciar sueños lúcidos
- Asegúrese de tener una buena higiene del sueño. Esto implica, entre otras cosas, una habitación lo más oscura posible, mantener una temperatura de unos 15-17ºC y dedicar por lo menos, entre 7-8 horas a un descanso reparador.
- Evite el consumo de marihuana o de alcohol ya que no le permiten dormir profundamente pues inhiben el sueño REM.
- Haga cortas siestas en las tardes si se siente cansado(a), especialmente luego de las comidas.
- Saque provecho de la aromaterapia para influenciar los sueños inducidos por el olfato (SLIPO). Los olores se procesan en el sistema límbico del cerebro que es donde se almacenan recuerdos y emociones. A veces, tan solo el olfateo de un aroma puede evocar e invocar potentes emociones. Algunos aceites esenciales que pueden ayudar a propiciar sueños lúcidos son el de rosa, sándalo, clavo, anís, artemisa, lavanda y salvia esclarea.
- Tome 100 mg de un suplemento de vitamina B6 por lo menos dos horas antes de dormir para soñar con mayor intensidad.
- Experimente con artemisa, una planta conocida por hacer que sus sueños sean vívidos.
- Incluya queso o un producto lácteo en su última comida. El queso contiene triptófano, un aminoácido que ayuda a promover el sueño, a normalizar patrones de sueño y a reducir niveles de estrés.
Finalmente, no tenga miedo de encontrarse de forma consciente dentro del espacio del sueño. La lucidez durante el sueño es una herramienta positiva y poderosa para su desarrollo personal.
En palabras de Hocelek,
“al aprender a trabajar con su mente en sus sueños, tiene el potencial de transformar su vida. Misma mente, distinto estado. Tome las percepciones recogidas de sus sueños, y su nueva y lúcida relación con ellos, luego aplíquelas a la "visión externa". Despierte en sus sueños para aprender a despertar a su vida”.
A mi todo se me va en deseos